17.6.10

Almohada puta

Cuando tenía siete años y aprendí a tejer me dijeron: "Mirá cuando seas grande y le tejas bufandas a tu novio." Bueno, apenas si me acuerdo del punto Santa Clara y estoy más sola que el Faro del Fin del Mundo, lo cual significa que las predicciones de mi tía abuela son menos certeras que el calendario maya y la película 2O12 con el reverendo salame de John Cusack en el papel protagónico.
Igualmente adoro a mi tía abuela.
La pregunta es: ¿Cómo es que en el medio de una de las batallas épicas entre mi cabeza y yo, en las que no logro conciliar el sueño, y, a partir de un insulto dicho en voz alta y el recuerdo de un recuerdo, termino escribiendo sobre mi desdichado infortunio amoroso seguido de una pregunta más larga que cola de jubilados en el Banco Nación a las diez de la mañana mechada con comparaciones del estilo de "almejas", "coliflores" o "cara de hisopo usado", para así no llegar a ningún lado más que a la conclusión de que ponerle un fin a/concluir algo me resulta inmensamente arduo?
No sé qué es peor, perder el hilo u olvidarse de cerrar la pregunta con un signo de interrogación.
De alguna manera, algo condujo a que me vea a mí misma, vestida con aires bohemios, tal vez ebria, deambulando por alguna calle de Soho bajo el cielo nocturno de Londres y exclamando a pura voz: "¡GRACIAS RETÓRICA, GRACIAS ENFERMA MENTE MÍA, GRACIAS PSICOANÁLISIS, GRACIAS VIDA, GRACIAS, GRACIAS!"
Algún día alguien va a caer bajo mis encantos y quizás vuelva a tejer, ya van a ver... Mientras tanto cierro los ojos, miro al cielo y sonrío al decir "Gracias.", porque siento que estoy viva y porque ahora misma me encuentro ebria en Soho. ¿Que qué más quiero? sólo una cosa: llegar.

Almohada, no sos una puta cualquiera, sos MI puta.

Agradecimientos:
Silvia Castillo, Erich Fromm, Julián Perdoménico (mi Ibupirac 6OO), Almohada, Jarvis Cocker, Amadeo Modigliani, Edgar Allan Poe, Insomnio, Rosa Schenkel.

1.6.10

Shuffle mode: ON

Respiro un aire distinto (el aire es el mismo, no respiro como antes), no siento frío y se me eriza la piel (estoy helada).
Estoy bien.
Uñas, latidos, gato, lapicera, suspiro, pseudouñarascaclavículaizquierda, collar, auto, viento.
No lo superé, pero estoy bien. Ya pasó.
Me pregunto si me extrañarán, cierro los ojos, suspiro; bueno, tampoco es un desarraigo tan terrible. Hago muchas pausas ¿Me falta inspiración? Que pensativa que estoy... Pause.
Next.
No es fácil desabrocharse el corpiño con una sola mano, menos cuando este combina con el pijama, que, a su vez, me recuerda a algo o alguien y no se a que/quien. 40 minutos más tarde, me recuerda a mi bronquitis.
You are not to blame for bittersweet distractors.
Wake up, Remembrance day, In perfect harmony, Illgresi... No, no, no; This is hardcore, oh sí.

Es culpa de mi iPod, no se la agarren con mi analista y/o mi psiquiatra.